viernes, 19 de noviembre de 2010

HOMENAJE A MIGUEL HERNÁNDEZ

I

Beso que viene rodando
beso que con luz me toca
que sólo encuentro buscando
en el sabio sabor de tu boca
beso que sólo nace entre tus labios
beso que trae tu saliva
beso sutil
que se acerca a mi piel
y la liba
(pétalos de clavel
tu lengua y la mía)

II

Vientos del pueblo me llevan
otra vez hasta la aurora
de nuevo los cielos sueñan
y otra vez llega mi hora

España, Grecia, Portugal
y Francia en el desafío
dan a Europa la señal
y de nuevo corre el río

que se alzará entre las sombras
y dejará sólo luz y sol y estío

miércoles, 13 de octubre de 2010

LOS CENSURADOS CENSORES O DE CÓMO ALGUNOS DE LOS PERIODISTAS QUE PROTESTAN CONTRA LA CENSURA ME CENSURARON Y DE CÓMO OTROS NO

Los sucesos que voy a relatar sucedieron el reciente viernes 8 de octubre de este 2010 de humo y de mordaza. Antes pues de la “tribuna libre” del domingo 10, y antes de que Angélica Mérida se sumase al piquete de huelga.

Volví a la U


No. No fueron Miki, Eliezer y/o Bowles digamos, quienes como estudiantes de sociología de la Gabriel René Moreno me invitaron a participar en un encuentro de cantautores llamado, no sé, Canción Política o algo así. No. Eso sólo pasaría en una novela de Sthephen King. Fue Miguel Ángel Rivero (no, no es mi pariente) quien sugirió a Ricardo Alfonso que como coordinador de eventos culturales de la UTEPSA nos invitara a Eliezer Franco, a Pekos (o Pekitos el del barrio, o Piqui, o Tu trovador en fuga) y a un servidor pa que cantemos. Miguel le había pasau un disco con mis canciones a Ricardo, y este había decidido que mis temas eran algo que sus estudiantes podían escuchar.
Así pues, el viernes pasau estuvimos ahí los tres y primero empezó Eliezer con su fijación por el muerto Gangocho y se mandó un super taquirari (me acuerdo de un verso: “su taxi era una tarasca, su copiloto era un canelau”) y después le metió otro tema pa una tal Ana (tema jodido che) y remató con el Great Hits absoluto que es “La fiestanga” (todos le hemos metido mano a esta canción y le hemos cambiau hasta el título (el “Burisango” le puso Castro y yo estuve de acuerdo). Él la canta en su versión, que es la original, y yo la canto como me da la gana).
Pekos o Piqui o Tu trovador en fuga cerró las cantadas (después hubo baile) con unas buenas trovadicciones, tan necesarias en estos tiempos de humo y sub consumo (“la ciudad se derrumba y yo cantando” cantaba Pekos o Piqui o Tu trovador en fuga)
Por mi parte, siempre mala onda y aguafiestas, les lancé Angélica Mérida (no sabía que ella estudiaba ahí) y por si no la captaron les dije que me oponía a la Ley Mordaza. Después lo saqué a Godofredo (“y el patrón enojau dirá agarrenmé a ese camba por favor…”) y les dije que ya sabían a qué atenerse en su carrera profesional. Por último, canté uno de mis temas pa los choferes de micros del tercer anillo, ese que dice: “y te insulta el estudiante, la rubia en su vagoneta última moda te insulta igual” y eso estuvo bien porque la UTEPSA queda ahí en el tercer anillo.

Y NADIE NOS CENSURÓ NI NOS SACÓ EL MICRÓFONO. No. Más bien a Ricardo le gustó y nos sugirió que hagamos otra tocada. Y eso que en mis canciones yo llamaba “ladrones” a los burgueses y todo.

Crónica de una censura

Después de la tocada en la UTEPSA fui a la plaza, a tocar y protestar contra la ley mordaza. Me acerqué al piquete de huelga de los periodistas y esto fue lo que pasó:

Había un tipo con el micrófono en la mano, arengando a la gente y eso. Yo me le acerco con la guitarra y le digo que quiero cantar unas canciones. El tipo me pone el micrófono y yo digo algo como esto: “estoy aquí para protestar contra la ley mordaza y contra el manejo de los medios por parte de la burguesía. Creo que la ley mordaza no es una cuestión que solo compete a los periodistas sino que es algo que afecta a todos los ciudadanos. Voy a cantar un tema que es una crítica al sensacionalismo de los medios y al mismo tiempo una crítica a las pretensiones del gobierno de cerrar canales”. Y empiezo a cantar:

Angélica Mérida vos
Que sos la que sabe todo
Respondeme de qué modo
Le hicieron los Monasterios
Para tener tanta tierra…


Y veo que las caras de algunos huelguistas empiezan a pasar de la sorpresa a la ira, y estoy terminando la primer parte del tema (“Angelica, ¿no será que en lugar de la verdad nos cuentan algo inventado?”) y el tipo del micrófono se va, se lleva el micrófono y me deja cantando a puro pulmón, me censura de manera pública en suma y yo me levanto (estaba sentado) y sigo cantando más fuerte y otro periodista dice: “yo no lo voy a censurar” y empieza a filmarme y mientras sigo cantando veo algunos huelguistas que se acercan airados y tambaleantes y al final termino la canción y digo bien fuerte otra vez que me opongo a la ley mordaza, y ya tengo a estos tipos alrededor mío diciéndome que “estaba ultrajando la dignidad de una mujer”, “que no los estaba ayudando” y no me dejaban explicarle que yo no estaba ahí por ellos sino por mí, pero otros periodista se acercaron a mostrarme su solidaridad y en eso viene uno a quererme entrevistar (deduje con razón que era del canal 7), sólo que algunos ¡no querían dejar que el tipo me entreviste!, pero otros periodistas estaban de acuerdo y el tipo al fin me entrevista y yo le lanzo un discurso donde dos frases de cada tres eran “dictadura masista” y “me opongo a le ley mordaza” sabiendo que el 7 me iba a censurar probablemente.

Fui pues, víctima de la censura de ALGUNOS periodistas que se oponen a la censura, y tuve el apoyo de OTROS periodistas que también se oponen a ella pero de verdad.

A todo esto, mi canción, censurada por ALGUNOS, acababa así:

Aunque sean desinformantes
Me opongo a que algún partido
Se ponga a cerrar canales
Y que decida él solito
Qué es lo feo y qué es bonito
Que son bienes que son males

Más bien tengo la ilusión
Que sean los que allí trabajan
Y que todo el día se rajan
Pa que haya televisión
Los que administren unidos
Los canales, sin patrones
Sin los privados ladrones
Ni dictadura e partidos
Que nos hundan en el lodo
De retóricas vacías

Ya decía yo

El gran éxito ideológico del MAS fue plantear las cosas de manera tal que la ley mordaza sea vista como un problema exclusivo de los periodistas. Aunque algunos de estos se han esforzado por mostrar que la cosa no es así, y que este es un asunto de importancia capital para el conjunto de la sociedad, lo cierto, y tal como se deduce de lo que acabo de relatar, es que hay ciertos periodistas que parecen pensar que sólo ellos tienen derecho a protestar.

Supe, por ejemplo, que a la diputada Jessica Echeverría no la dejaron sumarse a su piquete de huelga porque no querían que esto se “politizase” (¿?). La misma frasesita de siempre, como si esto no se tratase de una agresión política por parte del gobierno y de la necesidad de una defensa política por parte de la ciudadanía. Con semejante vocación sectaria no era de esperar mucho apoyo ciudadano.
Ya lo habíamos dicho hace algún tiempo. Los mass medias y sus operadores fieles al espíritu empresarial estaban haciendo todos los méritos para ganarse el repudio ciudadano, y sin necesidad de la mala propaganda del gobierno ellos solos ya comprometían y comprometen bastante su imagen frente a la sociedad.
De todas maneras, mucha gente -yo incluido, ha firmado esos libros, sin duda porque tienen clara conciencia de que la libertad de expresión es un asunto de todos.
Es urgente repudiar los artículos que hacen de esta pseudo ley antirracismo una ley mordaza, pero ello no es excusa para aceptar sin más las cotidianas canalladas de la burguesía privada que controla gran parte de los medios informativos de oposición. Y viceversa. Si es lícito sentirse ofendido como ciudadano por la manera en que los mass medias agreden constantemente a varios niveles, esto no ha de ser pretexto para apoyar las medidas draconianas del MAS.